Con un profundo clima de fe, alegría y esperanza, la Parroquia San Pablo de la Cruz, del barrio Huayco en Tarapoto, celebró este 8 de diciembre la Solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Virgen María, fecha emblemática para la Iglesia universal y para la comunidad local.
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La celebración eucarística fue presidida por el P. Rober Martínez Guerrero, párroco de la comunidad, quien actuó por delegación del obispo Rafael Alfonso López-Brea para la imposición de manos y la unción con el Santo Crisma. En esta importante ceremonia, 60 jóvenes recibieron los Sacramentos de Iniciación Cristiana, culminando un proceso de formación y acompañamiento que los fortalece en su camino de fe.
Una Eucaristía marcada por la emoción y el compromiso cristiano
La participación de los jóvenes estuvo cargada de emoción, irradiando alegría y gratitud por el amor de Dios manifestado en sus vidas. Familiares, catequistas y fieles de la parroquia se unieron en oración, acompañando este paso decisivo en la vida espiritual de quienes ahora se integran plenamente a la comunidad cristiana.
Durante la homilía, el P. Rober Martínez resaltó la importancia de vivir la fe con coherencia y servicio, recordando el llamado del apóstol Pedro, invitó a los nuevos miembros plenamente iniciados a convertirse en protagonistas de la evangelización, siendo testimonio vivo del amor de Dios en su entorno.
Una fiesta de la Virgen y de toda la comunidad
La celebración se desarrolló en un ambiente festivo propio de la solemnidad de la Inmaculada Concepción, patrona de la pureza y modelo de vida cristiana. La comunidad del barrio Huayco expresó su alegría por este acontecimiento que fortalece la fe parroquial y anima a continuar el trabajo pastoral con dedicación y esperanza.
La jornada concluyó con muestras de gratitud hacia los catequistas, familias y colaboradores que acompañaron el proceso formativo de los jóvenes, reafirmando el compromiso de la parroquia en la construcción de una Iglesia viva, unida y en misión.
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